Si el partido Morena llegara, realmente, a afianzar la política de austeridad en las cámaras legislativas, tanto federal como en los estados, los viejos políticos, de todos los partidos incluyendo a los neo-morenistas que saltaron a tiempo del PRI o el barco que se hunde, se llevarían el chasco de su vida. Descubrirían que la política ya no sería tan redituable. Al menos del tamaño del lucro que acostumbran.
Les digo esto porque, de acuerdo a las promesas de AMLO (que ojalá cumpla) en su “Proyecto alternativo de nación”, la mayoría avasalladora de su partido en el congreso local, dice que aplicará un recorte hasta del 50 por ciento de sus privilegios, incluyendo una baja en las dietas ¿Se atreverán?
“YA NO ES NEGOCIO”
En charla con algunos diputados federales que dicen que, como nunca, Oaxaca tendrá 25 legisladores en el Congreso de la Unión. 22 en la cámara baja y tres senadores. Susana Harp, Salomón Jara y Raúl Bolaños Cacho. Los dos primeros del Morena y el tercero es abanderado del Partido Verde.
Me dicen que, si realmente tuvieran amor por Oaxaca, estaríamos en la antesala de que, una camada tan numerosa, lograría para el estado que representan, no solo el presupuesto más alto en la historia de Oaxaca, sino muchas cosas positivas para Oaxaca. Sería lo ideal, pero “son políticos” y, por lo mismo, no hay mayores expectativas.
Entre los senadores y los 22 diputados federales (19 del partido de AMLO incluyendo a los del PT y del PES, además de dos del PAN y uno del PRD), no hay mucho ánimo porque el gobernador es del PRI y este partido fue barrido completamente.
Pero, me dicen, no solo son las diferencias políticas, lo más preocupante son las animadversiones que dejaron los dimes y diretes en las campañas. A eso hay que aunarle la actitud revanchista de los Morenistas que en su inmensa mayoría no asimilan que la política es así.
Entre estas observaciones hay algo más preocupante que puede orillar a los legisladores federales y locales, a la abulia.
ADIOS A LOS MOCHES
Me comentan que en una reciente reunión que tuvieron los Morenistas con el presidente electo AMLO, éste les dejó muy claro que en los congresos no habrá más “moches” ni dinero que no sea de las dietas para diputados y senadores, lo mismo que en las cámaras de los estados ¿Esto quesignifica? Que además de la reducción en sus salarios, no podrán allegarse recursos como los que hacían con los “moches”. Además de legislar su tarea se limitará a la gestión, pero no dispondrán de partidas como anteriormente se hacía.
En este espacio he mencionado casos concretos sobre los negocios que hacían los diputados, principalmente los federales. Ofrecían sus servicios a presidentes municipales para bajar recursos que al aplicarlos cobraban su “moche”.
A TONO
Aunque el gobernador Alejandro Murat no tenga un solo legislador federal de su partido, con excepción del senador Bolaños quien, aunque es verde, no oculta su afinidad a Murat, busca alternativas. El hecho de gobernar un estado con tantos diputados federales no tricolores lo lleva a cabildear intensamente para que, por encima de partidismos, vean por Oaxaca a la hora de etiquetar presupuestos.
Por lo pronto, el gobernador se ha puesto a tono con la política de austeridad de AMLO. A eso se debe que en su presupuesto para el ejercicio fiscal 2019, proponga asignar a la 64 Legislatura del estado, un presupuesto menor en un 40 por ciento al que los diputados ejercieron este año y que fue de más de 800 millones de pesos, dinero que gastaron con gran opacidad.
Si el actual Congreso, sobre todo la avasalladora mayoría Morenista, es congruente entre lo que anuncia y hará, el presupuesto que ejercerán el próximo año podría ser únicamente de 468 millones de pesos contra los 816 mdpque gastó la pasada Cámara.