La gloriosa Coordinadora de Normalistas del Estado de Oaxaca, que ayer luchaba por causas justas; hoy se ha vuelto una marioneta sin ideas, usada y manipulada por lo más básico del magisterio de la Sección 22 del SNTE.
Aquellos que con muchos años a cuestas, ante el cercano relevo del comité seccional, anhelan recuperar el caballo, que hoy parece domado por el gobierno estatal, el federal y la pandemia.
Los “chamacos” normalistas, manipulados por quienes viven de viejas glorias, no saben como argumentar su acción, luego que el IEEPO y la SEP a nada les han dicho que no; es decir, nada justifica su actuar, y por ese motivo, hoy, mañana y pasado mañana cambian sus presuntas demandas; el objetivo solo es joder al prójimo, y de paso al gobierno.
La apuesta de tratar de desestabilizar y arrinconar al gobierno, que no han logrado, no tiene otro fin, que el de provocar y buscar una reacción que les de la bandera de LA REPRESION, y después MARTIRIZARSE.
Son manipulados por esos rescoldos del 2006, y frustrados de haber llevado al poder al López Obrador, decisión que no les ha funcionado; y estos parecen no ver, que Oaxaca y el mundo han cambiado, y lo que ayer funciono, hoy está muy lejano de volver a funcionar.
Por eso, los normalistas cabezas hueca, que son incentivados por jóvenes ideologizados con ideas anacrónicas, deberían voltear a ver su realidad y analizar lo que están haciendo, porque lejos de forjar su futuro, ponen en juego su integridad, su salud, a sus familias y su seguridad.
Esto lo decimos porque en ningún momento se debe descartar que ante una falta de reacción del gobierno, sus líderes pretendan generar mártires desde dentro, lo cual, sería muy lamentable y que de todas maneras responsabilizarán al gobierno en turno, como siempre lo han hecho los grupos sociales que, destruyendo vidas, construyen mártires que les den motivos para radicalizar su lucha y tener motivos para seguir en su posición de agresores sociales.