Oaxaca, Oax.- Omar Esparza Zarate, dirigente del Movimiento Agrario Indígena Zapatista (MAIZ), dijo que se están organizando para realizar movilizaciones a partir del mes de noviembre, esto por la defensa de la tierra a raíz que el gobierno está vendiendo las riquezas naturales del subsuelo de los pueblos.

Lamentó que los principales problemas los viven las comunidades indígenas porque se les limita el desarrollo.

“Hay una política de Estado, no únicamente para MAIZ y que tiene que ver con el paramilitarismo o esquema de una política de seguridad nacional vinculada a lo que era el Plan Mérida dirigido a temas de la gendarmería para la militarización del país y sobre todo en los pueblos indígenas que tienen riquezas, yacimientos de plata y oro”, dijo.

Señaló que en algunos casos han ocurrido agresiones, hostigamiento, persecuciones, amenazas y asesinatos, refiriéndose al caso de la Bety Cariño que le quitaron la vida cuando se dirigía en una caravana humanitaria para San Juan Cópala y quien luchaba por la defensa de los pueblos indígenas.

Dijo que las reformas no han sido la solución ya que ha provocado el incremento de precios en todos los productos incluyendo la canasta básica, situación que afecta a todos en general pero lo siente a un mayor las familias de comunidades marginadas que ahora además son despojados de las riquezas naturales con que cuentan.

“A raíz de dicha situación es que nos vamos a movilizar bajo el lema “El campo es de todos” y donde participaremos un promedio de 40 organizaciones con presencia en el país para presionar al gobierno y decirle que la política agroalimentaria está llevando a la miseria a miles de productores”, refirió.

Agregó que dicha situación también ha sido la causa que el cultivo caiga y los campesinos no tenga como sobrevivir, lo cual también abre las puertas a la llegada de productos trasnacionales con llegada de empresas.

Mencionó que en la Mixteca hay más de 120 mil hectáreas de terrenos concesionados, algunos pertenecientes al distrito de Huajuapan, donde el interés de las empresas son los recursos pétreos y minerales, situación que ha generado hostigamientos y amenazas a los pueblos indígenas.