El miércoles por la tarde-noche, el señor diputado Manuel Pérez Morales mantenía retenidos a decenas de trabajadores y al mismo titular de Caminos y Aeropistas de Oaxaca en la Ciudad Judicial.

Llevó a un grupo de personas que le pusieron candados a las puertas de entrada a esas oficinas.

Los seguidores del diputado y él mismo, no dejaban salir ni siquiera a mujeres embarazadas señalan quienes vivieron este atropello por parte de un diputado que aprovechando su fueron y a un grupo de personas para tomar por asalto una oficina gubernamental.

Así estuvieron los empleados hasta que se desesperaron. A todo lo que daba sus gargantas, los empleados sindicalizados y de confianza de esa dependencia denuncian la conducta prepotente y amenazadora del diputado, que después se desinfló cuando los propios empleados de CAO le reclamaron y accionaron las alarma contra incendios.

El ambiente se tornó tenso por algunos momentos y terminaron en una discusión agria. Los trabajadores de CAO acusaban al diputado que exigía dinero por la construcción de algunas obras, pero en ningún momento mostraba los documentos que amparaban ese pago.

Sobrevino la rebelión de los secuestrados y encararon al diputado del Partido Social Demócrata con frases que le pedían, le exigían que los dejara salir. Todo ello, los trabajadores lo tiene grabado en video, según afirman.

En ese video, el diputado decía: “Estoy haciendo mi trabajo”, pero los trabajadores sindicalizados le reclamaban: “Tu trabajo no es venir a secuestrarnos y a encabezar plantones, tu trabajo está allá en el Congreso, ahí tienes que legislar, hacer leyes para defender nuestros derechos, esos derechos que ahora estás atropellando”.

En fin, a mucha distancia se puede observar que los legisladores que exigen respeto, tolerancia, diálogo y aplicación estricta de la ley, actúan con violencia y atentan contra los derechos humanos de la sociedad, de los trabajadores. No les quedó claro el mensaje del Secretario General de Gobierno, Alfonso Gómez Sandoval.