Oaxaca, Oax.- La visita del presidente de la República, Enrique Peña Nieto, vino a desatar la euforia y la alegría de la familia revolucionaria, quienes ahora se sienten envalentonados de cara al proceso electoral de este próximo 7 de junio en el que se renovará el Congreso Federal.

11 diputaciones estarán en juego en el territorio oaxaqueño, donde el Partido Revolucionario Institucional (PRI) tendrá que demostrar el interés que tiene para recuperar su presencia, porque en los últimos dos proceso electorales, sólo han ganado 3 de las 22 diputaciones federales que han estado en juego en seis años.

Esta es la realidad para el PRI en Oaxaca. Estos resultados han sido motivados por la decepción que hoy vive la sociedad mexicana, y de la cual, la oaxaqueña no está exenta, no sólo motivada por el PRI, sino también por el PAN y el PRD y los otros partidos políticos.

Hoy la sociedad está decepcionada de esa clase política que sólo le gusta mentir, amasar fortunas y fortalecer sus cacicazgos y olvidarse de la sociedad en general cuando están el poder. Esa es realidad de una sociedad defraudada por quienes se dicen sus representantes populares.

Este es uno de los ingredientes importantes que hacen que la familia revolucionaria se sienta segura de recuperar algunas de las posiciones perdidas en las últimas dos elecciones federales.

Las posibilidades están dadas, sin embargo, hay que recordar que en Oaxaca existe un mosaico de posibilidades, más aún ante los compromisos perversos de quienes realmente controlar el poder.

Aquí lo importante no son las siglas de los partidos políticos, sino los intereses de quienes, con el afán de proteger sus intereses de todo tipo, manejan cacicazgos políticos en una entidad que ha sido saqueada una y otra vez bajo el argumento de la democracia.

Pero deben tener cuidado, porque estamos ante una sociedad que ya no tal fácilmente se traga ese cuento de democracia de quienes la han explotado. Estamos ante una sociedad decepcionada por la falta de respuestas a sus más apremiantes necesidades.

Hoy los oaxaqueños poco a poco están generando conciencia, y más aún ante la importancia que tiene la renovación del Congreso Federal, donde, sin lugar a dudas, el desinterés de la sociedad será una realidad.

Lo interesante es que en este mosaico de posibilidades, los intereses perversos seguirán construyendo sus cotos bajo una supuesta democracia, no con el PRD, no con el PAN, sino con otras expresiones políticas a quienes han prometido ayudarles a mantener su registro como partido político nacional.