Cuando se habla de más de 40 mil consultas anuales y que de éstas el 75 por ciento corresponde a especialidades, también se habla de necesidades presupuestales que hasta ahora no habían estado a la altura de las circunstancias.

En más de una ocasión, los Servicios de Salud de Oaxaca plantearon la posibilidad de clausurar el nosocomio, sin embargo, prevaleció el derecho de la niñez a un espacio digno para ser atendidos.

Conocer las condiciones en que son atendidos cientos de niños es preocupante, por ello se debe reconocer la disposición para asignar recursos y empezar a trabajar en mejorar las condiciones de atención en el área de urgencias, donde se atienden en promedio 7 mil servicios anuales.

Al levantarse ayer el paro indefinido que mantuvieron los trabajadores del nosocomio, es importante reconocer que sólo con un mejor abasto de medicamentos, equipos y personal especializado, los niños y niñas que requieren de los servicios de la institución van a tener una mejor atención.

La inversión de 30 millones de pesos para el rescate del Hospital de la Niñez es un buen inicio y también la disposición de los trabajadores que durante los últimos 17 años hicieron del hospital un espacio prestigiado en la región sureste del país.