Por eso, en la reciente Asamblea estatal de MORENA Salomón Jara dijo: vamos contra dos PRI´s, el de Murat y el de Estefan. El desprestigiado Salomón Jara Cruz es el candidato de MORENA a gobernador, aquél que se engolosinó con los recursos de los hombres del campo en los primeros años de este infausto gobierno del “cambio”, cuando fue secretario de Desarrollo Agrícola, Forestal y Pesquero, compadre de Alejandro Murat, quien le puso el lazo matrimonial a su hija.

Sin embargo, Salomón realiza una tibia campaña. Por esto y la historia personal del consentido de López Obrador es que dirigentes con trayectoria y masas no voltean a ver a MORENA como opción, a pesar del descalabro de su líder Benjamín, siguen en el PRD. Claro tampoco van a perder las posiciones posibles en estas elecciones.

No hubo la atención adecuada a la posibilidad de competir con MORENA, en algún momento abierta para Robles. Quien encabezaba Unir Oaxaca con su alta autoestima creyó poder derrotar al gobernador hasta en el partido que éste controla, el PRD. Se le olvidó a Robles quien puso a la actual dirigencia, Carol Altamirano y el intelectual orgánico Hugo Jarquín. Todo le falló, hasta los porros con que junto con “Charvelín” Jesús Romero esperaba reventar la asamblea electoral. Del otro lado tenían eso y más, estaban mejor pertrechados. Hasta con la policía, enviada amablemente por el gobierno para apoyar a su candidato: Pepe Toño Estefan.

Pero el factor Salomón opera en esta fragmentación de la izquierda, que por supuesto él no provoca pero tampoco ayuda a reunir. Preguntamos a políticos de “izquierda” por qué no recurren a MORENA. Y la respuesta es: nada con Salomón. Parece obvio que la mayoría echa mano del erario, pero Salomón se pasa, es la opinión, aunque hay más razones. Al respecto tenemos testimonios de la gestión de Salomón Jara al frente de SEDAFPA en 2012.